En la actualidad la gran mayoría de las personas a nivel mundial, no saben usar correctamente el agua para los beneficios que se necesita, y es por esta razón que vemos algunos comportamientos irresponsables como él; lavar autos y motos con mangueras, desperdiciar cantidades en exceso a través de las canillas en el momento cuando se utiliza el baño o peor aún tirarla al piso cuando está limpia y puede servir para otro tipo de actividades, etc.
Por lo que tenemos que estar muy alertas, porque la tarea y la misión es necesaria, que es el de velar legalmente por el cuidado de nuestra única fuente de vida, ya que en este siglo XXI, si tenemos en cuenta los ejemplos de algunos países ubicados en los continentes de África y Oceanía, que al estar inmersos con bajos recursos sociales y económicos de supervivencia, han llegado a los extremos de generar conflictos civiles por tener el poder de estos servicios hídricos.
Por eso hay que enseñarles a todas las generaciones de la sociedad, empezando desde la primera infancia, para que se concienticen de corazón que es vital proteger la naturaleza por el bien de nuestra salud y convivencia, ya que dicho objetivo, no se debe tomar como un compromiso de ley de que si no se cumple seremos perjudicados judicialmente.
Donde en este momento mi estimado amigo lector, te invito a ser más precavido y cauto cuando estés utilizando el agua, recordando que la justicia y la vida nos llama a cuidarla, y tú eres el gran elegido para hacer este gran cambio, y como dice un proverbio bíblico “levántate y anda” para que hagas la diferencia.
Columnista: Sebastián López Alzate